viernes, abril 18, 2008

Una flor.


-Pero tío, cómo le haces una foto a eso.

-Ya, ¿eh? Haces fotos por sacar. No hay nada distintivo en esas flores.

-Porque me gustan –había contestado sin demora.

Y me gustaban, era cierto. Pero evidentemente no tenía intención de contar mis motivos reales.

No estaba pensando en los vistosos colores, ni en la esencia ginebrina, ni –lo siento, Elisa- tan siquiera en ti. En aquel momento en el jardín botánico, pese a no recordar las palabras literales, sólo prestaba interés a aquella cita de Richard Feynman:


Un amigo suyo había afirmado que un científico no podía apreciar la belleza de una flor en la misma medida que un artista; además, el científico convertía la flor en un objeto sin interés, pues la analizaba y descomponía. Feynman no estaba de acuerdo. Lo explicaba así:

“Me parece que está diciendo una bobada. Para empezar, la belleza que él [artista] pueda ver también está a la vista de otras personas y también de la mía, creo, aunque tal vez no sea yo tan estéticamente refinado como él. Pero yo puedo apreciar la belleza de una flor… y puedo imaginar las células que hay en ella y los procesos complejos que se desarrollan en su interior, que también tienen su belleza. Lo que quiero decir es que no se trata sólo de belleza a la dimensión de un centímetro; hay también una belleza a escalas inferiores: la estructura interna. También [hay belleza] en los procesos; el hecho de que los colores de la flor hayan evolucionado para atraer insectos que la polinicen reviste un gran interés, pues significa que los insectos ven los colores. Y ello entraña otra pregunta: ¿Existirá sentido estético también en las formas inferiores de vida? ¿Por qué es estético? Hay toda clase de preguntas interesantes que demuestran que el conocimiento de la ciencia no hace más que sumar a la emoción, el misterio y la admiración que nos produce una flor.”


The Pleasure of Finding Things Out.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

El otro día me explicaron cómo a flor de loto es impermeable por razón de su estructura.
Y yo, que no soy científica, pensé que era una idea magnífica para un poema.
(Me gusta este lugar)

Leralion dijo...

Gracias, Laura. Me alegra que te guste.

Anónimo dijo...

a veces no hace falta examinar demasiado las cosas para ver la verdadera belleza, igual soy un mal proyecto de científica, jeje

por cierto, bonitas flores

Anónimo dijo...

Diría que Feynman es de los que no ve el bosque por culpa de los árboles.

Dors-seldon dijo...

Hago mi primer "aporte" en tu blog. Aunque simplemente le llamaría "comentario" no se merece el título de aporte ;-p.

Me ha encantado. Y estoy totalmente de acuerdo con la cita de Feynman. No tanto como ver la belleza en su estructura concreta, pero si en general de la naturaleza, además de la belleza simplemente por su belleza. Es posible, además de probable, que de una pieza musical no saque el disfrute que puede darle a un músico profesional, eso no quita que yo no pueda disfrutarlo en otra escala diferente...

Nos leemos


PD: Aún no entiendo mi fascinación irracional por el mar... ¿Me ayudas a comprenderlo? ^^

Anónimo dijo...

yo quiero entender, dors-seldon, por qué es tan complicado responder en tu blog.

¿Tanto miedo te da?

Dors-seldon dijo...

Uhmmm, Creía que podían responder todos, arreglado, ya podrás entender que si se puede comentar en mi blog, y ahora el asunto del mar... :-p