Han pasado cincuenta años tras los acontecimientos de la entrega anterior. Desde los tiempos en que el doctor Floyd caminara sobre
El cometa Halley acudirá religiosamente a su cita con el Sol y la nave Universe se propondrá posarse sobre su núcleo. Lo que comienza siendo un viaje de placer para un grupo de famosos se ve truncado por un extraño accidente… al otro lado del sistema solar.
La tercera parte de la famosa saga de Clarke se presenta con pocas novedades. La trama se desarrolla en la misma línea que las anteriores: un viaje espacial, descrito con todo detalle. Aunque en esta ocasión la fecha en la que transcurren los acontecimientos le da carta blanca para especular un poco más sobre los avances tecnológicos. El argumento es menos pretencioso que el de cualquiera de las dos anteriores entregas y, en mi opinión, se nota un bajón en calidad. Parece que deja la puerta abierta para la cuarta y última odisea, ya tan lejana, en 3001.
1 comentario:
y por fin t vi :)
ya se q no dije nada dl texto...
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