Hace tiempo un colega me recomendó la nueva versión de la serie y, tras comentarlo en el Consejo Friki, me decidí a hacerme con los capítulos. Al parecer había dos temporadas, no muy largas, pero me han tenido entretenido una buena parte del verano.
Buf, una serie de ciencia ficción. Miedo me da. Pero fue ver los dos primeros episodios piloto, que al parecer fueron emitidos meses antes que el resto de la temporada y engancharme irremediablemente. Los primeros episodios son realmente buenos. La trama gira en torno de una idea principal y no precisamente original: La sublevación de las máquinas, los Cylons en esta ocasión. Sin embargo, no tarda en complicarse y combinarse con el entramado de intrigas políticas, militares y personales entre los personajes. Una chispa necesaria en este tipo de series que parecen tan lejanas y fantásticas. La primera temporada termina dejándote en vilo, como no podría ser de otra forma. Con la trama abierta y aspectos por comprender, algunos de los cuales no se aclaran aún en la siguiente temporada. Ésta sigue una línea muy parecida a su antecesora y consigue alimentar el gusanillo de la curiosidad en su justa medida. A medida que avanza parece perderse momentáneamente el principal elemento de la trama en pos de intrigas en la flota, pero pronto vuelve a encarrilarse aportándonos un excelente final que deja a los seguidores pendientes de que la tercera temporada vea la luz. Hasta entonces, paciencia, y que los Dioses de Kobol nos sean propicios. Eso decimos todos.
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